Lo que debes saber de fiscalidad si quieres abrir tu negocio como autónomo
Iniciar un negocio como autónomo es una aventura emocionante y desafiante. Desde la elección del nombre de tu empresa hasta la captación de tus primeros clientes, el proceso está lleno de decisiones cruciales. Sin embargo, uno de los aspectos más importantes, y a menudo más complicados, es la fiscalidad.
Conocer las obligaciones fiscales y cómo gestionarlas correctamente puede marcar la diferencia entre un negocio próspero o uno que se tambalee por las sanciones y el estrés financiero.
En este artículo, te explico las principales consideraciones fiscales que debes tener en cuenta para empezar tu camino como autónomo en España.
1. Darse de alta como autónomo: el primer paso clave
Antes de que puedas comenzar tu actividad económica como autónomo, debes registrarte oficialmente. Para ello, debes:
- Darte de alta en Hacienda (a través del modelo 036 o 037) y en la Seguridad Social.
- Seleccionar la actividad económica que vas a desarrollar (según el IAE, Impuesto sobre Actividades Económicas).
- Elegir si te acoges al régimen de estimación directa (modalidad simplificada o normal) o al régimen de estimación objetiva (módulos) para declarar tus ingresos.
La elección del régimen de estimación es fundamental, ya que afectará a cómo tributarás en el IRPF y el IVA.
2. Impuestos a los que te enfrentarás como autónomo
Como autónomo, deberás hacer frente a varios impuestos de manera regular. Aquí te detallo los más importantes:
- IRPF (Impuesto sobre la Renta de las Personas Físicas): El IRPF es un impuesto progresivo que grava tus ingresos como autónomo. Cada trimestre deberás presentar el modelo 130 si estás en estimación directa o el 131 si estás en módulos. Al finalizar el año, tendrás que hacer la declaración anual del IRPF.
- IVA (Impuesto sobre el Valor Añadido): Si realizas una actividad sujeta a IVA, tendrás que presentarlo de forma trimestral (modelo 303) y hacer el resumen anual (modelo 390). Recuerda que no todos los profesionales deben aplicar IVA, por lo que es importante revisar si tu actividad está exenta o no.
- Retenciones: Si facturas a empresas o profesionales, deberás aplicar una retención del 15% en tus facturas (aunque los nuevos autónomos pueden aplicar un 7% durante los primeros dos años).
3. Cuota de autónomos: un gasto fijo mensual
Una de las mayores preocupaciones de los autónomos es la cuota que deben pagar a la Seguridad Social. En 2023 se introdujo un sistema de cuotas progresivas, basadas en los rendimientos netos del autónomo. Esto significa que pagarás una cuota ajustada a tus ingresos reales. El rango de cuotas varía desde los 230 € hasta los 500 € aproximadamente, dependiendo de los ingresos que declares.
Además, los nuevos autónomos pueden beneficiarse de la tarifa plana, que durante el primer año reduce significativamente el importe de la cuota a unos 80 € mensuales.
4. Gastos deducibles: aprovecha las ventajas fiscales
Una de las claves para optimizar tu fiscalidad como autónomo es conocer qué gastos puedes deducir en tu declaración del IRPF. Algunos de los gastos más comunes que puedes deducir son:
- Gastos de local o espacio de trabajo.
- Material de oficina y herramientas necesarias para tu actividad.
- Teléfono, internet y suministros si trabajas desde casa (aplicando un porcentaje).
- Kilometraje y otros gastos de desplazamiento relacionados con tu actividad.
Recuerda que los gastos deducibles deben estar directamente relacionados con tu actividad y debes conservar todas las facturas y justificantes en caso de que Hacienda te lo solicite.
5. Obligaciones contables y registro de facturas
Como autónomo, aunque no estás obligado a llevar una contabilidad formal como lo haría una empresa, sí debes mantener un registro de ingresos y gastos. Es crucial que lleves un control riguroso de todas tus facturas emitidas y recibidas, así como de los justificantes de gastos. Esto no solo te ayudará a cumplir con las obligaciones fiscales, sino que te permitirá tener una visión clara de la salud financiera de tu negocio.
6. Consejos para evitar problemas fiscales
- Planifica tus pagos: Es recomendable reservar un porcentaje de tus ingresos para el pago de impuestos y la cuota de autónomos. Así evitarás sorpresas desagradables.
- Revisa las deducciones: Aprovecha todas las deducciones fiscales a las que tengas derecho. Consulta con un asesor fiscal si no estás seguro de qué puedes deducir.
- Cumple con los plazos: Los autónomos tienen que cumplir con fechas específicas para la presentación de sus impuestos. Presentar fuera de plazo puede generar sanciones y recargos.
Abrir un negocio como autónomo es una decisión llena de oportunidades, pero también conlleva responsabilidades fiscales importantes. Mantener un control riguroso de tus cuentas y cumplir con todas las obligaciones te permitirá centrarte en el crecimiento de tu negocio y evitar problemas con Hacienda. Si tienes dudas, no dudes en consultar con un asesor especializado que te ayude a optimizar tu fiscalidad.









